El concierto fue muy emotivo e innovador debido a la utilización de recursos sonoros y visuales. Prácticamente, el estadio le quedó chico. (FOTOS: JAVIER ROGOSKI)

NOTA: Paulina V Becerra

Rata Blanca tuvo una noche soñada al tocar en el mismísimo Luna Park  con la participación de la orquesta sinfónica de Damián Mahler, que estuvo integrada por más de 20 músicos de absoluta calidad. 

Sin dudas fue una producción enorme, de primer nivel, en la que contó con visuales impresionantes a través de una pantalla gigante HD.

La apuesta era grande pero solo quienes arriesgan, ganan. En pantalla se mostró un alerta de impacto inminente, cosa que realmente sucedió en los sentidos de todos los presentes.

El tema que abrió la noche fue el significativo “Los chicos quieren rock”, siguió, entre otras, con “Mujer amante”, que tuvo una genial interpretación acústica. Realmente fue emocionante para los fanáticos de esta banda. Y finalmente, concluyó con “La leyenda del hada  y el mago” y “El último ataque”, que son mis favoritos.

Como si fuera poco también pasó por los hits como “Endorfina” y “El Talismán”. La primera fue la más cantada de la noche. Fue impresionante porque siguen manteniendo la magia que bien los representan. Ni hablar de la voz de Adrián Brilari.

Walter Giardino, como buen capitán que sabe cómo guiar su nave hacia buen puerto, se tomó unos instantes para dirigirse a los presentes y comunicarles la alegría y agradecimiento de la banda por todos estos años de apoyo incondicional de sus fans, no solo de Argentina, sino también de todo el mundo.

Esto se vio reflejado en la extensa gira que hicieron este año por Europa, Latinoamérica y Estados Unidos, país éste en donde marcaron un hito sin precedente para el rock nacional, al girar por casi dos meses.


Cabe destacar que formaron parte del repertorio  “La llave de la puerta secreta”,”El guardián de la luz”, “Noches sin sueños”, “Capricho árabe”, “Sinfonía fantástica”,  y “El sueño de la gitana”. Impresionante, siguen manteniendo la magia que los representa

Rata Blanca también mostró su vocación solidaria al sortear una guitarra de firmada por Walter Giardino entre las personas que donaron alimentos no perecederos para un comedor de la provincia de Entre Ríos, cuyo nombre es “Siempre con los chicos”. Las donaciones la recibió un camión estacionado en la Puerta 7 del Luna Park. El ganador fue el número 538.

El recital resultó ser un concierto histórico, mágico, con sonidos de otro planeta y con un juego de luces, imágenes y humo que impactaron gratamente en el público.