La artista presentó su nuevo single llamado Corazón Verde, donde una vez más muestra su capacidad de desnudar su alma en versos.

Por WALLY LEGUIZAMÓN CAJAL

Aquellos que creen en la espiritualidad saben que cada chakra tiene un color representativo, uno de esos centros de energía es el cardíaco y el tono que lo define es el verde. Justamente “Corazón Verde” es el nuevo tema de la artista María Campos, quien lo acaba de presentar en sociedad y que se lo puede escuchar en todas las plataformas digitales.

Tras el éxito de su tema “Separadas”, desnuda su alma en versos de amor con su último single. Audaz y temerosa, frágil y fuerte, iluminada y oscura, María muestra los múltiples rostros del deseo con una trasparencia que no se veía desde hace tiempo.

Desde el calor de su casa, dialogó con Dale que sos Rock en una entrevista donde no sólo se refirió a Corazón Verde, sino que también habló sobre la importancia de la música en su vida y recordó a esa niña de 12 años que empezaba a escribir sus primeras letras. 

Si bien María comentó que el tema “refleja la inmadurez del amor, a su parte más ilusoria y vulnerable”, remarcó que también se centra en “la valentía que hay que tener al pasar por ese momento de angustia que nace cuando una comienza una nueva historia”. No por nada escribe “si te da miedo tomate un trago, déjate llevar como fruto verde caerás”…

Además, lejos de trazar una diferenciación con “Separadas”, sostuvo que “no son tan distintos, aunque Separadas se hizo para una tira televisiva, ya que ambas canciones hablan de salir adelante, de tener fuerzas, aún cuando se está vulnerable”.

¿Qué es lo que la lleva a escribir a María Campos?, es la pregunta que ella misma respondió sin vueltas: “Yo creo que la ilusión es el combustible que me inspira a hacer una canción, la ilusión nunca me deja sola”.

No obstante, valoró la importancia de la desilusión en la carrera artística “porque también es muy atractiva” a la hora de crear. “Se siente placer, un regocijo, al escuchar canciones que hablan sobre cosas más pálidas”, argumentó. 

En relación a la llegada que está teniendo Corazón Verde en el público, reveló que se sorprendió un montón por ” la repercusión que está teniendo el tema, pensé que la gente no se iba a conectar tanto con él porque todo lo que está pasando. Me gusta que se conecten con la emoción y sé que últimamente está muy mental”.

El arte como terapia

Ser artista no sólo es una capacidad, sino que también es una manera de vivir y de  retratar el alma. En este sentido, remarcó que “escribir es relajante, aún cuando uno escribe luego de vivir una desilusión. Sin dudas es una energía linda”.

Ella escribió su primera canción a los 12 años y desde ese momento su relación con el arte se volvió más fuerte y necesaria. “La música es una gran terapia, te ayuda a aprender cómo llevar adelante una situación”, reflexionó.

FOTO: NATALIA PETRI

En este sentido, recordó que lo que la llevó a crear su primer obra fue una desilusión amorosa. Y aunque hayan pasado los años, sigue conservando esos sentimientos de “idealización, nostalgia, esperanza”. Pero lo que sí cambió fue “la confianza” en ella misma.

A diferencia de otros artistas, consideró “egoísta” pensar en la vuelta de los recitales porque “es un momento de angustia, de dolor, para muchas personas, yo no me siento preocupada por volver a tocar, me preocupa más que todo salgamos de esta (la pandemia de coronavirus y sus consecuencias)”.

En la actualidad se encuentra trabajando en la difusión de Corazón Verde y realizando vivos a través de las redes sociales. “Me resulta muy lúdico hacer los vivos y que la gente se cope pidiéndome canciones, a principio no me gustaba, pero me divierte”, subrayó.